Llegados a Martinica, los participantes del Ocean Raid – Gran Prix del Atlántico pudieron disfrutar del merecido descanso tras la travesía atlántica y compartir todas sus experiencias con el resto de participantes en la recepción para tripulaciones que se organizó en la Marina du Marin.

Enrique Curt, Director del Ocean Raid, acompañado de Armando Guillarte, Coordinador local de la prueba, entregaron a todos los capitanes una maqueta conmemorativa de una yola, embarcación local, con la insignia de la prueba como reconocimiento a su exitosa travesía.

A partir de aquí, cada uno de los barcos activó su propio plan de navegación por aguas caribeñas. Los participantes han ido informando de su particular periplo y compartiendo recomendaciones de los mejores destinos , fondeaderos y puertos.

En sus singladuras caribeñas han podido reencontrarse con otros participantes, participar en regatas, como el caso del CMR en la Heineken Week de St. Marteen, o tener encuentros inesperados como el de la tripulación del Galatea con Álvaro de Marichalar en Cuba, que está realizando una travesía en moto de agua para conmemorar la circunnavegación de Juan Sebastián Elcano.

Al iniciar la crisis del coronavirus, algunos habían dejado ya sus embarcaciones en puerto y regresado a España. Sin embargo, algunos otros estaban todavía disfrutando de la navegación en el Caribe. En la mayoría de las islas se han tomado medidas que implican el confinamiento de los navegantes en su propias embarcaciones. El navegante solitario Juan Antonio Martín, está viviendo esta situación en Guadalupe a bordo del Vagabundo. Las tripulaciones del CMR y del H3 Habana hacen lo propio en Dominica y Martinica, respectivamente. Por su parte el Aixkire, ha decidido partir desde Antigua rumbo a España, mientras que la tripulación del Galatea ha dejado el barco en Marina Hemingway de Cuba para regresar a Barcelona.

Todos ellos planean ya el próximo encuentro de navegantes para compartir estas últimas experiencias.