DAVID RUIZ, ARMADOR DEL ‘THOR V’ INICIA SU VUELTA AL MUNDO

UN SOLITARIO, MUY SOCIABLE

Conocido en ámbitos atlantistas y en el mundo del diseño publicitario, David Ruiz es uno de estos entusiastas de la navegación a vela, que ha hecho de su afición una filosofía de vida.

 

Armador del Thor V, con el que ha cruzado cuatro veces el océano Atlántico, el pasado 5 de diciembre partió de nuevo impulsado con los alisios con el objetivo de alcanzar la isla antillana de Martinica. Un paso previo de su actual proyecto, consistente en dar la vuelta al mundo en solitario, realizando escalas en puntos emblemáticos de la geografía oceánica, donde el solitario ‘permitirá’ el acompañamiento de amigos y familiares, y disfrutar, juntos, de estos parajes que encierran los mares del mundo y que solo se pueden conocer a bordo de una embarcación.

 

‘Iniciaré mi periplo en Marina Rubicón, – nos dice, antes de partir – en la isla de Lanzarote, donde he estado a lo largo de todo el mes de noviembre preparando al Thor, para adaptarlo a la nueva aventura. Lanzarote es como mi segunda casa. Mi casa atlántica. Un entorno maravilloso, gracias a César Manrique’.

 

Como buen creativo, sabe que solo la experiencia directa te hace descubrir el placer de conocer. Y David quiere conocer físicamente y plenamente el mundo. Y esto adquiere su máxima magnitud si lo haces en el mar.

 

‘El objetivo de este viaje es disfrutar y compenetrarme totalmente con el barco y el mar, con la técnica de navegación y la naturaleza, correr millas en mar abierto y disfrutar del viento, que es lo que me gusta de la vela’, – nos comenta.

 

‘Será un viaje sin prisas, sin compromisos. Tengo, si todo va bien, reservados tres años de tiempo para completar esta aventura’.  Nos cuenta que los tramos de navegación larga las hará en solitario y cuando llegue a ciertas zonas ‘donde quiera prolongar mi estancia, por su atractivos, me quedaré varias semanas y la disfrutaré compartiendo mi viaje con mis amigos y familiares’.

 

La primera fase del viaje, es la travesía atlántica desde Canarias a las Antillas. ‘Este trayecto lo haré en solitario’. La intención es recalar en Martinica. ‘Una vez allí, me encontraré con amigos y visitaremos con detenimiento estas islas del Caribe, en compañía,  para proseguir el viaje hacia el occidente y cubrir otro gran reto del viaje, cruzar el canal de Panamá’. En el Pacífico, las travesías largas también las hará en solitario, y cuando llegue a Galapagos, ‘haré otra escala de ‘sociabilidad’ con quien quiera acompañarme en este territorio que tanto cautivó a Darwin’. Después David proseguirá a las islas Marquesas, la Polinesia, Nueva Zelanda, ‘y a lo que se preste…’

 

David Ruiz es un conocedor del océano. A pesar de navegar mucho por el Mediterráneo, donde tiene su puerto base en Port Ginesta (Barcelona), siempre le ha tentado el viento oceánico y Atlántico. De joven, este exitoso diseñador gráfico que ha trabajado para marcas como Audi, Bodegas Torres, Seat, Camper, ING Direct, Tous, fue un apasionado del windsurf y del viento, que aprovechaba sus ratos libres para deslizarse con su tabla y hacer olas con los levantes y ponientes de la zona de Tarifa. Se inició con el Optimist, con el equipo infantil del Club Marítimo de Barcelona. Antes de adquirir su actual velero en el año 2009, el Thor V, un Cigale 14, tuvo un RO 300 llamado Pez y un Firts 35.7 llamado Luna. Su entusiasmo por el mar le llevó a navegar por las zonas más ventosas del Mediterráneo, Cerdeña, Grecia, y, como no, por las islas Eólicas. Siempre buscando el viento.

 

Ha participado en dos Gran Prix del Atlántico, en la edición del año 2010 y en la del 2014. En su primer Gran Prix solo hacía dos años que descubrió en Sables d’Olonne, a su fiel compañero de navegación Thor V , un Cigale 14 de aluminio, diseñado por el célebre arquitecto naval Jean Marie Finot, que fue a buscar, recién salido de astillero, a la misma Les Sables d’Olonne y lo bajó por mar, desde Atlántico francés para traerlo a Barcelona pasando por Gibraltar. Desde entonces Thor V es su ‘alter ego’ en el mar. Su compañero, su confidente, su amigo, su hogar.

 

Ahora David Ruiz acaba de abrir una nueva aventura marítima. Está en su inicio y ha reverdecido su pasión atlántica, para descubrir nuevos océanos.

Podemos seguir su periplo en este web site